Ya estamos aqui

Título fácil para este post, pero es que después de ver la película de Wayne Wang no me quedaba otra. En esta película en la que el vicio del fumar esá presente, de una forma secundaria, durante toda su duración, se nos va contando la historia de gente común, que lógicamente, como todas esas personas comunes que nos rodean en nuestras vidas, tienen en común una historia diferente y especial con capacidad para sacudirnos. La verdad es que siento debilidad por este tipo de historias que entrelazan sutilmente varias vidas, que crean un todo muy atractivo en el que todo cuadra como los engranajes de un reloj suizo. Y en Smoke sucede esto. Y la historia final es sin duda un grandísimo final que te hace saborear todo lo que has visto hasta ese momento, de forma sencilla, y, tengo que decirlo, magistral.

Cuidado con la película para los ex-fumadores, es que hasta me dieron ganas de fumar un poco.