miércoles, septiembre 03, 2008

Felinos contra roedores

Poco nos queda para llegar al medio millar de entradas, así que espero que Simbilla se porte y promueva un concursillo con maravillosos premios para todos aquellos seres que pinchan en esta página con la ilusa convicción de encontrar algo que llene sus pequeñas vidas. No va a ser hoy, pero no perdais la esperanza y la inocencia que os caracteriza. Por no decir ése alto nivel comunicativo del que hacéis gala.



Creo que me desvié un poco del tema del post, felinos y roedores... sí ya recuerdo, esto va de un cómic, aprovechando la visita al salón del cómic de Coruña (llevan ya un güevo de "salones"), no podía irme de allí sin pillar alguno (pagando eh). La verdad es que poco entiendo del mundo del cómic, así que dejé que la publicidad de los medios de comunicación, la portada y los comentarios de conocidos y más conocidos me influenciaran en la decisión de elegir un cómic. Así que entre otros cogí uno de un tal Art Spiegelman cuyo título es MAUS, en idioma galego. En la portada pone una atrayente frase: "Premio Pulitzer 1992", y porqué atrayente, al fin y al cabo es un premio yanqui que ni siquiera sé quién lo otorga (ahora no me apetece consultar la wikipedia), pues atrayente por el grandísimo libro "La conjura de los necios" de J.K. Toole, que recibió el citado premio (claro que tiempo después que el novelista se suicidara porque nadie quería publicarle su libro). Bien, pues esa misma noche comencé con el descubrimiento del mundo de MAUS, el mundo del nacismo, los judíos, su caída en desgracia y campos de concentración. Es triste, ver cómo un cómic te puede mostrar con unos dibujos antropomorfos de ratones (judíos) y gatos (nazis), es una sensación muy curiosa, pero es que te cuenta tan bien lo jodido que lo pasaron , que no te queda más que la tristeza, con ciertos toques de humor, negro, como no podía ser de otra manera. Pero al parecer no sólo esto le valió el reconocimiento al auto de MAUS, sinó el mostrar la vida que les quedaba a los hijos de esta gente que tanto sufrió durante la 2ª Guerra Mundial. El cómic es autobiográfico, con lo que todavía gana más en realismo, repito, a pesar del dibujo que utiliza. Las idas y venidas al pasado y el presente ayudan a tenerte enganchado, con la pena de no durar más el relato. Me gustaría comentar la innovación que supuso para el cómic este autor y MAUS, pero para eso que hablen los que entiendan, o que se consulte internet y las bibliotecas, eso sí siempre con la duda de si ese genio maligno nos está o no engañando, no vaya a ser que luego os creáis que existís.

P.D. El símbolo de la portada es muy bueno

1 Voces del pueblo:

Simbilla dijo...

Ves, para que luego me deis la paliza con lo de que los comics no comunican nada. Pues ahora metele mano a algo menosserio y a ver si terminas de meterte en el mundillo.

Por cierto te llego el de Plan BB?